terapias de avanzada

EMDR – Técnica de los Anteojos Hemisféricos® – y Técnica de 1 ojo X vez®

Dra. Raquel C. Ferrazzano de Solvey – Médica
Dr. Julio Laurindo –
Médico Psiquiatra
Dr. Pablo Solvey –
Médico

Introducción:
Existe un consenso generalizado tanto en ambientes profesionales como en el público en general, y en la  gran mayoría de  médicos y psicólogos, que la curación de los cuadros emocionales o psicológicos es necesariamente lenta, trabajosa y dolorosa y que se necesitan largos períodos de tiempo para conseguir algún resultado.

Desde los comienzos de la psicoterapia, con S. Freud, P. Janet, etc., hasta nuestros días poco ha cambiado este concepto. Detengámonos a pensar un instante: en esa época una carta enviada de América a Europa tardaba cerca de 50 días entre ida y vuelta.  ¿Qué ocurre en cambio hoy? Sea por el fax o por el e-mail, el tiempo de respuesta de una carta es de minutos o segundos.

¿Es acaso concebible que estos adelantos en las comunicaciones que se encuentran también en otras áreas de la técnica y de la ciencia no existan en la psiquiatría, en técnicas psicoterapéuticas que abarquen más allá de las nuevas medicaciones?

¿Será posible que la psicoterapia haya quedado estancada?. ¿Porqué habría de haber un área – una única área, la psicología – que no haya crecido y adelantado? La respuesta es compleja: para el grueso de los practicantes de la psicología esto es así, mantienen los sistema lentos y de dudosa eficacia imperantes en sus comienzos, olvidando que a los pioneros, como Freud  se les debe pedir y reconocer la primera palabra.

Con el psicoanálisis o las psicoterapias dinámicas se necesitan meses o años de tratamiento para lograr cambios. Otras técnicas como la Desensibilización Sistemática y las Técnicas Cognitivas – Conductuales  son mas rápidas, aunque sin embargo tarda un buen número de sesiones en producir resultados.

¿Es una función del cambio psicológico requerir  extenso esfuerzo y  tiempo? ¿Podría ser que las terapias basadas en las nociones tradicionales no sean enteramente apropiadas para la tarea  de asistencia a los pacientes y para lograr cambios en forma rápida, eficiente y duradera?

Recientemente ciertos investigadores han desarrollado nuevos enfoques. Son Técnicas de Alta Eficacia, que producen  resultados terapéuticos,  en muy corto tiempo. En promedio entre 60 a 180 minutos de tratamiento logran bajar notablemente la  perturbación dada, por ejemplo un recuerdo traumático.

Estas técnicas  no se basan en los contenidos de las ideas sino en la neurofisiología existente en el momento de pensar esos contenidos. Con un diferente abordaje obtenemos un cambio en esta neurofisiología,  y como resultado se obtiene un cambio en el contenido de los pensamientos y de las emociones. Son tratamientos con bases neurofisiológicas.

Uno de los modelos que sustenta estos abordajes, postula  que estas emociones inapropiadas  producen un desequilibrio en la simetría de ambos hemisferios cerebrales, y como consecuencia de esto se mantienen las emociones disfuncionales en forma intacta.

Si conseguimos equilibrar los hemisferios cerebrales mientras se piensa o se siente aquello disfuncional, logramos corregirlo en forma automática y casi inmediata.

La posibilidad de desensibilizar traumas en forma veloz, sin necesidad de un trabajo arduo ni por parte del paciente ni por parte del terapeuta, posibilita abreviar la duración y el costo de los tratamientos en forma considerable.

Los cambios como respuesta a estos tratamientos son objetivables  a través de un mapeo cerebral computarizado. Para la práctica cotidiana, en los tratamientos, nos basamos en las respuestas subjetivas del paciente antes y después de la aplicación de estas técnicas.

Las TICTécnicas de Integración Cerebral son:

  1. EMDR: Francine Shapiro -1987 -( Eye Movements Desensitization and Reprocessing) Desensibilización y
    Reprocesamiento por el Movimiento Ocular-USA 
  2. Técnica de los Anteojos Hemisféricos®: Frederick Schiffer – 1998 -USA– Solvey y Solvey –
    2000 – Argentina.  
  3. Técnica de un ojo x Vez®: Audrey Cook & Richard Bradshaw – 2000 – Canadá.

1 – EMDR:

El método conocido como EMDR, sigla en inglés que significa  Desensibilización y Reprocesamiento por el Movimiento Ocular, (Eye Movement Desensitization and Reprocessing)  consiste en la estimulación sensorial bilateral, en forma alternada, por medio de movimientos oculares, sonidos  o golpeteo en la palma de las manos u otras partes del cuerpo, mientras el sujeto focaliza su atención en la situación problema.

Este estímulo provoca, cuando se efectúa “según arte”, ( lo que queremos dejar sentado que no es sencillo por cierto, si bien puede parecerlo a los ojos de un observador poco informado), un intercambio de información entre ambos hemisferios cerebrales a través del cuerpo calloso.

Esta información adaptativa y realista, que por el bloqueo producido por el trauma no estaba al alcance de la persona (por causas que explicaremos detalladamente en el Capítulo 2) lleva a la resolución del cuadro tratado, como resultado se produce la desensibilización de las emociones negativas e inadecuadas y una reestructuración cognitiva, que permite al individuo encontrar nuevas  soluciones, funcionales y realistas, resolviendo por lo tanto la patología preexistente.

Es un método de elección para el estrés postraumático, fobias y trastornos de ansiedad, como lo son también todas las Terapias de Avanzada. EMDR fue creado por la Dra. Francine Shapiro, PhD., psicóloga del Mental Research Institute, de Palo Alto, California, en 1987.  La Dra. Shapiro tuvo una observación genial: se dio cuenta azarosamente que al tener pensamientos perturbadores y angustiantes se incrementaban los movimientos oculares en forma espontánea, como ocurre en los períodos REM del sueño.

Investigando luego con el proceso inverso, comprobó que al hacer pensar a una persona en un recuerdo desagradable y hacerle mover los ojos en forma forzada, el recuerdo se atenuaba y cedía en intensidad esto es : se desensibilizaba. Se producía la desaparición del malestar que anteriormente  provocaba, lográndose además una lectura diferente, mas positiva: una reestructuración cognitiva.

Poco después la Dra. Shapiro lo aplicó con pacientes traumatizados por diversas causas: guerra de Vietman, violaciones, abusos, accidentes. Este fue el primer estudio sistematizado, con un grupo control, que se realizara con EMDR. Se lo llamó el Estudio de Mendocino, por la ciudad de California en donde se efectuó.

Actualmente, se han realizado en todo el mundo numerosos estudios que avalan este método.

Lo que se obtiene con el EMDR así como con las otras Técnicas de Integración Cerebral, es poner en marcha un  sistema de autocuración y de reprocesamiento de la información, propio del sistema nervioso central. En suma se trata de un aprendizaje.

Técnica de los Anteojos Hemisféricos®  (F.Schiffer – 1998 – Solvey & Solvey, 2001) / Técnica de 1 ojo x Vez® (A. Cook & R.Bradshaw – 2000 )

Se trata de dos nuevos métodos terapéuticos que posibilitan la integración de las diferencias de percepción que existen con frecuencia entre los dos hemisferios cerebrales.

Permiten observar el distinto enfoque de un problema cuando la persona lo contempla con uno u otro hemisferio cerebral por separado. Entre ambos hemisferios hay diferencias notables en creencias, emociones, sensaciones corporales y niveles de perturbación que producen los temas a tratar. Se logra la integración de esta información disímil, que está provocando perturbaciones mentales o emocionales, rápidamente  al integrar la percepción de las mismas en ambos hemisferios. Se desensibilizan así traumas, obsesiones, fobias y creencias negativas.

Esta integración permite una visión mas realista del problema, al converger ambas perspectivas, lográndose corregir todas las distorsiones, así como todas las emociones o miedos irracionales o exagerados. Estos cambios se mantienen en el tiempo, y la patología resuelta no retorna.

2- Técnica de los Anteojos Hemisféricos®

Consiste en unos anteojos especialmente diseñados que permiten activar separadamente (y por turno) los hemisferios cerebrales, de modo que el sujeto puede “ver” dos puntos de vista propios y diferentes respecto a un mismo tema.. Si bien nos imaginamos a nosotros mismos con un cerebro, funcionalmente tenemos dos – uno izquierdo y uno derecho. Existen  sin duda considerables funciones comunes a ambos hemisferios, pero también existen diferencias considerables.

Para la mayoría uno u otro lado serán dominantes, y a grandes rasgos determinarán como ven y experimentan el mundo. Cuanto más dominante sea un lado sobre el otro, tanto más inclina nuestras percepciones y determina nuestra conducta. Siempre usamos ambos lados de nuestro cerebro, cambiando permanentemente en un ida y vuelta, para obtener los mejores beneficios de ambos hemisferios. Pero en ocasiones nos quedamos “ pegados”  a un lado, incapaces de conectarnos con el lado más útil para esa ocasión. En general, esto se debe al estrés. Y es el estrés – o el trauma – que limita nuestra capacidad de tener un acceso inmediato a los recursos que poseemos.

A medida que el tema es observado varias veces en forma alternada y secuencial, con los distintos hemisferios, estos se  van  integrando en sus percepciones, bajando la intensidad de la perturbación hasta desaparecer como por “arte de magia”… y “el problema” deja de serlo. Esto permite desensibilizar cualquier situación que produzca ansiedad o miedo inapropiado. Schiffer MD. comenzó a usar los anteojos dentro de una terapia estructurada psicodinámica. Nosotros ( Solvey y Solvey-2000), desarrollamos el sistema de aplicar un gradiente, crecientemente desensibilizante, durante todo el proceso terapéutico y dentro de un esquema cognitivo, hasta lograr en poco tiempo, a veces pocos minutos, la desensibilización del tema.

3- Técnica de 1 ojo x Vez®

El método de “ 1 Ojo x Vez®”, fue desarrollado en 2000, por los canadienses A. Cook, PhD., y R. Bradshaw, PhD. Consiste en observar el problema a resolver con un ojo por vez. Con esta técnica se activan también, como consecuencia, los hemisferios cerebrales separadamente.

Con esta técnica se obtiene un beneficio extra: se pueden buscar dos cosas: una de ellas el “shock” o incredulidad acerca de lo sucedido, habitual en situaciones altamente traumáticas. Su resolución es la única manera de poner en marcha la desensibilización del trauma. A menudo se observa que con uno de los hemisferios la persona “cree” lo que le ha pasado, pero con el otro no. Es decir lo sabe con la corteza cerebral, pero lo niega con el corazón. Su discurso está plagado de “no lo puedo creer!” “es imposible!”.

Mientras esta incredulidad persista, es imposible la elaboración y la integración en la vida del sujeto  de la situación vivida. El otro hallazgo, propio de esta técnica, es el de la presencia de ciertos puntos en el campo visual, llamados “nudos”, que aparecen al hacer el recorrido  con la mirada de un ojo por vez, todo el campo visual pensando en la situación traumática. En estos puntos se  concentran, curiosamente, las emociones más disfuncionales, ligadas a sensaciones físicas de ansiedad. Una vez disueltos estos “nudos”,  con una “ad hoc”, el problema desaparece o se reduce a su mínima expresión.

Conclusión:

Con estas técnicas nos adentramos en un terreno hasta ahora desconocido, consistente en un paradigma totalmente novedoso, a través del cual encontramos una manera de modificar la sintomatología  psíquica sin hablar prácticamente del tema, por medio de la neurofisiología, abreviando significativamente todo el proceso terapéutico.

Si el cerebro fuera tan simple que lo pudiéramos entender,
nosotros seríamos tan simples que no  lo podríamos hacer ” 
Lyle Watson


Referencias Bibliográficas:

-Bogen J.E – ( 1962)  “Partial Hemispheric Independence with the Neocommissures Intact en  Brain Circuits and Functions of the Mind”. Bull. Los Angeles Neurol. Spc.
-Cook, Audrey and Bradshaw, R. ( 2000) – “Toward Integration” – One Eye Press  Canadá.
-Dinond, S.J.; Farrington, L.; Johnson P.,( 1976) “Different Emotional Response from Right and Left Hemispheres”. Nature 261:690-692.
-Gerhards F, Yehuda R, Shoham M, Hellhammer DH ( 1997) Abnormal Cerebral Laterality in Post traumatic Stress Disorder. Ann NY Acad Sci  821: 482-485).
-Kinsbourne, M.,( 1974) “The Mechanism of Hemisphere Asymmetry in Man” In: Kinsbourne M, Smith WL, eds. Hemispheric Disconnection and Cerebral Function. Springfield, IL, Charles C. Thomas
-Le Doux J.E.; Gazzaniga, Wilson, M.S., (1977) “The Integrated Mind: Observation on The Conscious Properties of the Separated Hemispheres”. Ann. Neurol. 21:417-421.
-Ledoux, J. (1996)  – “The Emotional Brain” – Simon and Schuster – New York.
-Ornstein , R. ( 1997)  – “The Right Mind”  – The Harvest Book – N. York.
-Schiffer, F. (1998)  – “Of Two Minds” –  The Free Press – New York.
-Sperry, RW.  – ( 1966) “Brain Bisection and Mechanisms of Consciousness”. Brain  and Conscious Experiences, New York, Springer-Verlag

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